viernes, 20 de noviembre de 2009

¡NO! A LA PORNOGRAFÍA INFANTIL


Salí de mi portal
a la calle de aprendiz,
con chubasquero puesto
por si llovía en el jardín
y me cruce con uno
que llevaba regaliz
en su mano derecha
y en la izquierda un querubín.
El niño, rubio era,
con sonrisa de pasquín,
aquella mueca ingrata
no me hizo presumir,
seguí sobre sus pasos
hasta el oscuro devenir…

Pasaron muchos años,
quien me lo iba a decir,
cuando le detuvieron,
en la tele yo le vi,
el mismo tipo oscuro
que portaba regaliz
y sobre aquella cama
fotos, desnudo infantil.

Ahora me pregunto,
me cuestiono yo sin fin
cual fue mi motivo,
no fui a la guardia civil.
Si os pasa, amigos míos,
lo que aquel día advertí,
no les dejéis tan solos
como al rubio querubín.
Jesús Arroyo

12 comentarios:

Anónimo dijo...

Es verdad, Jesús: no podemos dejarlos solos, ellos no pueden ni saben defenderse.

Un abrazo!! :) Reina

Alma naif dijo...

Tan cierto Jesús... son tan pequeños que no pueden defenderse, pero lo peor es que algunos padres... por si se los puede llamar asi... lo permiten para ganarse unos pesos a costillas de esos niños indefensos...
Hace unos dias... buscando imagenes de Francine Van Hove llegue a un blog accidentalmente donde habia imagenes de niños pequeños semi-desnudos... con posiciones adultas para su edad.. con cigarrilos en la mano... mira no sabes la indignación que me dio... pero sinceramente no supe que hacer... era un blog japones...!!!
Se denuncia... supongo.. de todas maneras eran fotos que no pertenecian al titular del blog!!!
Vere que hago!!!
Besos cielo, llenos de luz para ti!!!

Tris dijo...

Es un tema que me puede, que me saca de mis casillas, y ante el depredador, no les doy ningún tipo de absolución.
Es más desearía tener mi corazón de plomo y acabar con ellos.
Eso si, despacio, con el sufrir eterno.

Un saludo, y a los supervivientes...
que no dejen de serlo, y que el hoy sea siempre como el ultimo día.

Xiomara dijo...

"Lo que se les dé a los niños, los niños lo darán a la sociedad" Karl A. Manninger, psiquiatra estadounidense…la única herramienta es charlar con ellos acerca de este tema…informarlos no hay excusa alguna para no hacerlo…si los dejamos navegar debemos prepararlo para lo que pueden encontrar en este medio así con en la vida cotidiana …besos

Merce dijo...

Todo apoyo es poco, todo lo que se haga es poco...

Carmen Graña Barreiro dijo...

Debemos y tenemos que estar atentos para denunciar a los miserables que hieren a nuestros niños.
Un abrazo

@Intimä dijo...

Más alto y claro es imposible, gritémos todos NO con un solo grito.
Besitos :-)

Scarlett Butler dijo...

a veces los veo en mi trabajo (los grandotes) y crees que son muy mayores pero necesitan toda nuestra protección y apoyo. Y los pobrecitos que están desamparados (anda que no hay de esos...), una pena, no pueden defenderse y se aprovechan de ellos.... No sigo más que si no... Un besote

Emilio dijo...

Uno mi NO al de los demás.
Saludos.

Mª Rosa Rodríguez Palomar dijo...

En este tema, como en tantos otros, nuestro silencio se hace cómplice. Siempre lo pienso, debemos alzar la voz por los indefensos, por los que no pueden alzarla, por los que no ven, por los que no saben...por todos los que serán víctimas si no lo hacemos.

Luisa Arellano dijo...

Quizás parezca poca cosa, Jesús, pero uniendo nuestro grito, siempre conseguiremos más que estando callados ante tanta atrocidad cometida con los más indefensos: los niños.

Un abrazo muy fuerte.

Tesa Medina dijo...

Sí, debemos defenderlos, entrometernos, no dejarlos solos.

Una vez se hizo una exposición con dibujos hechos por niños abusados sexualmente.

Los analizaron varios expertos en terapia y llegaron a una terrible conclusión:

Los niños podían llegar a olvidar, si eran muy pequeños, al abusador, pero destacaban como lo peor en sus imágenes al consentidor, al que no hacía nada por defenderlos, y lo terrible era que, en bastantes casos era su propia madre o alguien de la familia encubriendo a otro familiar abusador.

Tolerancia cero para los pederastas.

Sigo poniéndome al día por tu rinconcito.

Besos, Jesús