Cerré la cortina al sol del desayuno.
Tostadas sobre el mantel y en él
una loza sevillana con café,
una naranja derretida en un cristal,
una cucharilla de cualquier metal.
Frente a mí… tu sed,
fuente de mi vivir,
manantial nocturno tu desnudez
sobre la blanca cama de este hotel.
Tostadas sobre el mantel y en él
una loza sevillana con café,
una naranja derretida en un cristal,
una cucharilla de cualquier metal.
Frente a mí… tu sed,
fuente de mi vivir,
manantial nocturno tu desnudez
sobre la blanca cama de este hotel.
Chechu Arroyo
copyright Chechu Arroyo ©
copyright Chechu Arroyo ©
13 comentarios:
Wow
y así para que comer.... mágicas sensaciones dejaste con tus letras...
Un abrazo
Si asì fueran todos los desayunos.
Palabras que transportan, al delicioso desayuno:D
Besos y muchos màs.
CHECHU
A eso le llamo yo despertares de ensueño...que felicidad tener el poeta al lado.
petonicos, sempre.
qué bonito, maravilloso desayuno compartido
besos
lágrimas de mar
frente a mi tu sed...
¡y que no falte nunca!
besos.
Un despertar así, con este desayuno en verso, es un despertar
único.
Que tengas muchos despertares...
Un beso, como siempre.
Se palpa la placidez y la plástica de la escena en este poema de mañana relajada y recuerdos de noches placenteras.
Besos, Chechu
Los desayunos en el hotel me gustan... Me traen recuerdos de momentos muy placenteros y relajantes.. El tuyo una delicia..
Besos.
Vicky:
Umm... comer, comer...
Besos.
Amancer:
Especiales, eran especiales.
Besos.
Martona:
Bueno, bueno...
Un beso.
Lágrimas de mar:
No está mal.
Besos.
María:
Eso espero ¿cómo vas?
Un beso.
Lucía:
No me gustan los desayunos en la cama, pero en los hoteles...
Besos mil.
Tesa:
Cuando el recuerdo está en la mente... es por algo.
Un beso.
Viento:
Si, si, si... relajantes y placenteros a la vez.
Un beso.
Chechu, no hay mejor desayuno que el que nos ofrece el amor.
Un beso de los grandes
Sandra:
Asi es! El desayuno del amor, con amor y desayuno... pura perfección.
Un beso.
Siempre me han gustado los amaneceres en los hoteles. Saber que gozas de tranquilidad y en esos momentos, darte la vuelta hacia él y al sentirlo a tu lado le besas suavemente para no despertarlo y velar su sueño.Luego, ya vendrán los besos de buenos días.
Tierno, Chechu.
Un beso.
Malena:
Entre el poema y lo que dices... tengo qe decirle a "mi chica" que reserve junto al mar.
Besos.
Publicar un comentario