jueves, 11 de marzo de 2010

GUÍA DE MUSEO, TRABAJO ESTABLE


Marcadas las ocho de la tarde,
Ambrosio desplegaba su silla
con la parsimonia acostumbrada.
Antes de esa hora, el sol calentaba
dispuesto a derretir pensamientos,
puro arte a la puerta del museo.
Aprovechaba al entusiasmado
turista de cámara en costado
para narrarle su ayer de lienzo
a cambio de gustosas monedas
con sabor a sardina enlatada
entre currusco de cartón piedra.
En dos meses de limosnas gratis
su cuerpo parecía la raspa
de aquellas sardinas enlatadas
y un ujier, pues era palacete
aquella brusca pinacoteca,
le recomendó en plaza de guía.
Nada fue lo mismo entre los cuadros,
Velázquez vestidos de Miró,
acuarelas secadas al horno
y préstamos de una varonesa
yaciendo desconsolados, muertos
sin exposición verbal y técnica.
Toda la vida presumió Ambrosio
de licenciado en artes de lienzo.




Jesús Arroyo
copyright Jesús Arroyo ©

23 comentarios:

La Solateras dijo...

El idealismo del artista, el pragmatismo del funcionario. Eterno dilema. El dibujo es muy bueno, visto del derecho gana mucho.
Besos

Jesús Arroyo dijo...

Es que este Ambrosio, cuando tenía que ayudar a colgar...

Enrique Gracia Trinidad (EGT) dijo...

Da gusto pasear por tu blog, amigo.
¡Las ideas para el que las trabaja!
Abrazos para Ambrosio y para ti.

Jesús Arroyo dijo...

Maestro Enrique:
Me dice Ambrosio, hablo con él todas las mañanas antes del café con galletas (el jodio viene a casa muy temprano para ver que engancha), que estaría encantado de conocerle. Yo creo, sabiendo de sus vivencias, que es para presumir de amigos.
Abrazotes.

Sara dijo...

UFFFFFFFFFFFFF CUANDO hablamos de Ambrosio y del trabajo estable...que mal suena amigo Jesús, ¡que mal suena!. Las dos caras de la moneda que se complementan, como el ying y el yang.
Esta entrada me ha recordado a gente de esas con las que me he topado y que van robando ideas y vendiéndolas como propias. Esos son otros Ambrosios distintos....jajjaja.
Abrazote y disfruta el finde que se acerca

Marisa dijo...

Qué buena vida se da ahora
Ambrosio, trabajo estable
y el café gratis.

Un gran abrazo.

Lucía dijo...

¡Qué país! Al final, Ambrosio, no hace nada que no veamos muchas veces y con otros nombres, ufff.
Besazos mil.

Angeles Fernangómez dijo...

JA-JA-JAAAA, me ha encantado. ¿A qué baza nos quedamos, Jesús?
Me parece muy original, hay extrañamiento aquí.
Bueno, y lo de "Ambrosio", ni te digo. Si no fuera porque yo soy de las que opino que todas las palabras son poéticas, sólo hay que ponerlas en su sitio..., diría que vaya nombre tan poco poético que le has puesto. Ni se te ocurra cambiarlo, me encanta. Era una broma.
Besos

Jesús Arroyo dijo...

Sara:
Venga, venga, el petate te espera para subir a la montaña. Hoy ya es viernes.
Besazos.

Marisa:
No sé cuando le durará, pero lo sabréis proximamente.
Besos.

Lucía:
Y como no lo haga... ¡malo!
Besos mil, guapa.

Ángeles:
He tenido dos personas cerca con ese nombre y como dicen que no hay dos sin tres... Una de ellas era un buen amigo de la pandilla (barrio de la Conce) y todo el poemario está dedicado a él. Fue cocinero, guardaespaldas, amante de ancianas... La otra persona fue mi padre, jejeje (menos mal que el primer nombre, el conocido y reconocido, era Jesús). Ahora no me digas nada como eso de "lo siento, no lo sabía" jejejeje, me parto.
Besazos, guapa mía.

ROCIO dijo...

A mi me gusta todo el nombre, precisamente por no ser poético y la historia, real o no estás genial.

Te veo muy sembraoooo ultimamente.

Un besote en breve en persona.

Rocío

Amaya Martín dijo...

Es un poema costumbrista, que dota de gran belleza, de ternura a lo cotidiano
Incluso el nombre del sujeto: Ambrosio, me resulta entrañable

Un abrazo

Terly (Juan José Romero Montesino-Espartero) dijo...

Cuantos Ambrosios pululan por las puertas de museos e iglesias. ¡Que necesidad de que las limosnas no sean gratis aunque sepan a sardinas enlatadas!
Gran imaginación, Jesús, y mucho arte.
Nos vemos en breve.
Un abrazo.

Mª Ángeles Cantalapiedra dijo...

jesusito hoy has tenido la maestria de hacerme ver cada verso y de disfrutar del trabajo y sentir de ambrosio
besotes

Jorge Torres Daudet dijo...

Simpático y ocurrente poema, Jesús.
Seguro que el artista te enseñará idiomas.
Un abrazo.

Jesús Arroyo dijo...

Rocio:
Es que me abono...
Besazos y en una semanita...

Amaya:
Pinceladas de realidad??? de imaginación???
Besos.

Terly:
Como decía una abuelilla... "no vemos en una ná"
Abrazotes.

Cantalapiedra:
Sabes que es un placer.
Besazos.

Jorge:
Me ha enseñado, me ha enseñado...
Un abrazote, caballero.
PD. Mil gracias por todo, ¡ya sabes!

Mª Rosa Rodríguez Palomar dijo...

Los trabajos pierden su encanto cuando se convierten en estables, esa palabreja los transforma en losas pesadas para toda la vida, pero ¡qué te va a contar una funcionaria!, menos mal que en estos tiempos que corren tienen su "mijita" de atractivo, el de no estar a expensas de cierres, Eres o despidos simple y llanamente.

Con la imagen me ha dado el tirón de las cervicales, chico!!

Un beso

Malena dijo...

Si él era feliz de esa manera...

Mil besos y mil rosas.

Elena dijo...

Cuantos Ambrosios habrá por las calles a los que le gustaría leer tu poesía...
Bonito poema y bonito homenaje.

Jesús Arroyo dijo...

Shikilla:
Es que le llego el cuadro a Ambrosio y como licenciado en lienzo que dice ser, lo colgó como creía que se vería mejor.
besazos, guapa.

Malena:
Supongo que sí, pero no lo sabremos nunca.
Besos.

Elena:
Que poquito nos quedaaaaaaaaaa.
Besazos.

Elsa dijo...

Si es que cualquiera sirve para un cosido... y para funcionario de nómina congelada y estable.
No se enfaden los nominados, que yo también lo soy.

Muy divertido, Jesús.

Besazos.

PD: Si no cambia, hace buen tiempo por estas latitudes. Que disfrutéis.

carmen jiménez dijo...

Pues fíjate Jesús, que si no es por tus comentaristas, ni caigo en la cuenta de que Ambrosio se convierte en funcionario. Y es que yo le hubiera seguido viendo como el que cuenta que en otros tiempos fue licenciado en artes de lienzo. Y si no distinguiera a Velázquez de Miró, lo mismo seguiría creyéndole.
Sin duda un poemazo.
Mis felicitaciones.

Nico dijo...

Las palabras se recalcan en pensamientos, ideales o sentimientos que nos salen de las entrañas. De la sangre de un corazón herido, o de las venas de esa ira contra lo injusto. Tu eres evidencia en mis pensares.

Aprovecho y te dejo la invitación para que te pases por mi blog.

Saludos!

Jesús Arroyo dijo...

Elsa:
Todo es ponerse...
Besazos.

M.Luna:
Pues... fíjate tú, que lo mismo estás en lo cierto y este hombre es sólo un atrevido.
Besines, guapi.

Nico:
Estás en tu casa.
Saludos.