miércoles, 9 de enero de 2013

Juzgado número uno de la Sala de lo Natural



Estamos en el Juzgado
voluntario
del desastre:
a este paso
cambiaremos los bosques y sus fuentes
por ciénagas enraizadas de basura

para que la tierra nos disponga
en su sentencia.


copyright Jesús Arroyo ©

7 comentarios:

Amando García Nuño dijo...

¿No se puede suspender el juicio, al menos otros diez milloncejos de años?

Mª Ángeles Cantalapiedra dijo...

Feliz año, lo primero, querido Jesús... atinados versos

Amando Carabias dijo...

Y después de que nos disponga (la tierra) que nos deponga.

Isolda Wagner dijo...

Los versos son fantásticos, Jesús. El Juzgado, menos, pero me ha encantado. Muchos besos.

Esther dijo...

Apelo por un divorcio entre hombre y ambición.
Besote

Maria Sangüesa dijo...

Duro e intenso poema, al avanzar por tu buen camino poético- y vital-... las ciénagas quedarán atrás. Delante sigue habiendo hermosos bosques. Un fuerte abrazo.

Jesús Arroyo dijo...

Amando:
Y verlo dentro de esos años??? porque habrá que seguir vivos.
Abrazos.

Cantalapiedra:
Igualmente. Actuales.
Besitos, muchos.

Amando:
Siempre haciendo.
Abrazotes.

Isolda:
Un placer tener este comentario.
Besazo.

Esther:
Sentencio!!!
Besos.

María:
Pero, a veces, son esos árboles los que ciegan.
BEsazos, compi.